Comunicaciones

El día de tu bautismo

El siguiente texto es un “a modo de carta” que unos padres, Álvaro y Laura, dirigieron a su primer hijo, el día de su bautismo, con el fin de que en el futuro su hijo la pueda leer.

“Querido hijo: hoy es un día muy especial para todos nosotros, pero sobre todo para ti. Es el día de tu Bautismo. Esto significa que a partir de hoy entras a formar parte de la gran familia de la Iglesia. Ahora bautizarse no está muy de moda… pero irás descubriendo que la verdadera felicidad no entiende de tendencias, sino de AMOR con mayúsculas.

Dios nos ha honrado con el mejor regalo: ser tus padres. Y como padres, el mejor obsequio que te podemos ofrecer es elegir para ti el sacramento del Bautismo. En su día nuestros padres lo hicieron con nosotros y les estamos muy agradecidos, ya que con ello sembraron la semilla del Amor de Dios en nuestros corazones.

A partir de ahora ya nunca vas a estar solo. Tus padres, tus padrinos, tus abuelos… y todas las personas que te queremos vamos a caminar a tu lado. Pero, sin duda, el que siempre va a ir contigo sin soltar tu mano es Jesús, el amigo que nunca falla. Puede que en algún momento no lo notes o dudes, o incluso dejes de creer en él. Pero, a pesar de todo, ten por seguro que él siempre va a creer en ti y va a permanecer a tu lado de manera incondicional y siempre con los brazos abiertos de hermano ejemplar.

A medida que vayas creciendo te hablaremos de él para que lo conozcas y descubras los valores excelentes que propone para desarrollar una vida digna y plena. Y también para que te impulse a hacer el bien en todos los ambientes en los que te muevas, ya sea el día de mañana en el colegio, en tus estudios superiores o en tu futuro empleo. Siempre, con el Amor de Dios y las bienaventuranzas como faro que ilumine tu vida.

Felicidades, hijo, porque, por el Bautismo, comienzas una nueva etapa que nunca termina y que tiene una meta: ser inmensamente feliz y hacer felices a los demás. Para esta misión, nunca te faltará nuestro apoyo, nuestro cariño… y lo más importante: el amor de Dios, que todo lo puede, todo lo cambia, todo lo cura y todo lo salva…”.

 

 

Publicaciones relacionadas

Mira también
Cerrar
Botón volver arriba

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies